Las coquetas están saladas, otro lesionado en Emelec

El defensa argentino Aníbal Leguizamón, sí, uno de los que aguantaba el barco de Emelec, se dio una buena paliza en el último partido. Nada menos que un combo: nariz golpeada por aquí, rodilla resentida por allá, con hematomas y edemas de regalo. Y a esperar siete semanas para volver. 

¿Y qué creen que pasa con Emelec? ¡La cuesta abajo se vuelve más empinada! Con resultados de risa y broncas en la interna, ya estaban arrastrando los pies. Y esta lesión es como echar más leña al fuego de su crisis. Cada vez la cosa se ve más turbia y oscura para los azules.

La cosa está tan pero tan fea, que ya ni los más fanáticos pueden ocultar su preocupación. Están en una posición tan incómoda en la tabla que parece que están bailando al borde del abismo. Y esta lesión solo los empuja un poco más al borde.

Nosotros, desde nuestro rinconcito amarillo, no podemos evitar nos preguntamos. ¿Cómo no alegrarnos un poco ante este panorama? ¡Si hasta podría decirse que están haciendo méritos para irse a la Serie B! No es que queramos ser malvados, pero la situación de Emelec se presta para unas risitas, ¿no creen?

La rivalidad no descansa, siempre pensado que es futbol

En fin, el fútbol da vueltas y este golpe en la nariz y la rodilla es una muestra de que nada está escrito en este deporte. Pero no vamos a negar que nos da una pizca de placer ver cómo el rival de patio se revuelca en su propio drama. ¡Que se recuperen pronto... o no!