Católica le empató a último minuto a Barcelona SC y la excusa que puso Rescalvo

El partido entre Barcelona SC y Universidad Católica culminó con un amargo empate para el equipo 'torero', que vio cómo la ventaja se esfumaba en los minutos finales, en lo que se conoce como un gol "a último minuto" o en el tiempo de descuento. Este resultado, especialmente en condición de local, generó frustración en la hinchada y puso nuevamente en el ojo del huracán al director técnico español, Ismael Rescalvo, por la falta de capacidad para cerrar los encuentros.

Tras el pitazo final, Ismael Rescalvo ofreció su análisis en rueda de prensa, señalando que el proceso del equipo es la clave, más allá del resultado inmediato. El técnico esgrimió que “Estamos construyendo un equipo más competitivo”, buscando enfocar la atención en el proyecto a largo plazo y en la mejora progresiva de la plantilla. Este argumento suele ser utilizado para amortiguar el impacto de un resultado adverso, sugiriendo que las fallas actuales son parte de un crecimiento necesario.

Uno de los puntos clave en la defensa de Rescalvo fue la comparación con el rendimiento anterior del equipo. El estratega mencionó que “Mejoramos la imagen de lo que dimos contra LDU”, aludiendo a un partido previo (presumiblemente una derrota o un mal desempeño ante Liga de Quito). Al destacar esta "mejora de imagen", Rescalvo intenta rescatar aspectos positivos en el juego, como la actitud o la propuesta ofensiva, minimizando la pérdida de puntos en casa.

La excusa más específica del técnico se centró en la poca generación de peligro del rival: “El rival apenas nos llegó a portería”. Con esta declaración, Rescalvo apunta a la solidez defensiva del equipo durante gran parte del encuentro, sugiriendo que el gol del empate fue un infortunio o una desatención puntual, y no el reflejo de un dominio sostenido de Universidad Católica. Esta métrica es un clásico en su discurso para justificar el resultado.

Si bien las declaraciones de Rescalvo son vistas como una excusa por parte de la afición, el técnico siempre incluye una dosis de autocrítica en sus análisis. En partidos con resultados negativos, ha reconocido en otras ocasiones que al equipo le ha faltado contundencia en las oportunidades creadas y que el rendimiento en casa ha sido un "déficit profundo". La incapacidad para capitalizar las llegadas y cerrar el marcador es el verdadero problema que, según él, les impide ser líderes.